Es extraño que esté escribiendo a esta hora. Es tarde, escucho mil veces Black de Pearl Jam y tengo un sueño atroz, me ha costado dormir bien, pero con música se soluciona todo. Además, tengo que terminar parte de mi proyecto. Sé lo que tengo que hacer, el problema es que no hay información en cuanto a lo que requiero y temo fallar, pero haré lo imposible y sacaré esto adelante...
La razón por la que escribo es otra. Hace unos minutos estuve borrando mails de notificaciones cuando me encontré con una que me pareció sorprendente... no conozco quién fue el que me lo mandó en realidad, pero cuando lo comencé a leer, noté que era la carta que Felipe Cubillos había escrito cuando viajó en su regata.
Puedo decir que fue un placer el haber leído 24 puntos llenos de esperanza. Hace tiempo que necesitaba leer algo así, y él me ha dado eso.
A veces somos injustos en lo que nos sucede a diario, quejas, peleas, enojos por tonteras, en fin, mil cosas que nos encerramos en nuestra burbuja. Yo también soy así, no me excluyo ya que soy una persona demasiado criticona y molesta con todos. Pero al leer la carta, hubieron cosas que cambiaré hacia mi persona. No es que sea influenciable, es que a veces no vemos más allá de las cosas, que creemos que lo que hacemos, decimos, y actuamos, está bien, pero no es así. Fue casi decir: "Abre los ojos y aprende esto, no es lo que pensabas..."
Ammm... eso sería, no quiero seguir escribiendo y aún sigue la canción de Pearl Jam sonando ... sería 52 veces que la escucho(?) quién sabe ...
Igual dejaré la carta de Felipe Cubillos en otra entrada...
Mientras tanto, quería expresar lo que sentí al momento de haber leído las bellas palabras que nos dedicó.
Saludos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario